No lo digo yo, lo dice Villarino; pero conociendo los principios psicologicos que hacen adictivos los logros y los aprendizajes de patrones, bien podría ser verdad. Subir fácilmente los primeros niveles de experiencia es agradable. Proporciona una pequeña dosis de sensación de triunfo sin necesidad de terminar las 10 o 15 horas de un juego y ayuda a continuar adelante.
Eso de aplicar una subida de niveles a todo no deja de ser gracioso. ¿Cuántos px daría cada punto de Pac-man? ¿Ganaría habilidades Ryu como los personajes del "Shadow over Mystara"? ¿Y como sería un Buscaminas con niveles?
Encontrarse con esta versión en "Rock, Paper, Shotgun" no deja de ser ojiplático. Primero porque el numero deja de ser las minas que rodean las casillas para ser la suma de los niveles de los monstruos a su alrededor. Segundo porque no te matan todas las minas, solo pueden matarte monstruos de nivel superior al tuyo. Y tercero porque cambia la forma de afrontar la partida, y las buenas vueltas de tuerca siempre dan juego.
En dos sabores, normal y extremo.
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